13 de marzo de 2013

Por amor a la música: Molotov - ¿Dónde jugarán las niñas?

Pues parece que esta semana me va a tocar a mí dar la salida de la nueva etapa en el rally mundial de Por amor a la música. Esperemos que los problemas técnicos de M.A.V. se solucionen en breve y pueda cerrar el círculo antes de lanzarnos al siguiente reto.

La verdad es que tras pasar por Japón me quedé sin ases en la manga. El resto de países que se me ocurren son, o muy pero que muy jodidos, o muy pero que muy fáciles. De todas formas, llevaba mucho tiempo queriendo encontrarle un hueco a ¿Dónde jugarán las niñas? y la ocasión se presenta que ni pintada.

Así que ya sabéis, esta semana no cogeremos avión, sino que nos basta con un barco para viajar desde cuba al vecino México. Y si os fijáis bien, allá en la lejanía, en el muelle, podéis ver a los Molotov agitando pañuelos blancos al viento, preparados para hacer que nuestra visita sea inolvidable.


Corría el año 1996 cuando Tito Fuentes (que no Puente), Micky "Huidos" Huidobro, Randy "El gringo loco" Ebright y Paco Ayala conseguían, casi sin haber empezado, uno de los hitos más importantes en su carrera: telonear a Héroes del Silencio y conseguir que todo México DF conociera sus canciones de memoria sin tener siquiera una referencia en la calle. Por eso no es de extrañar que poco tiempo después Universal les ofreciera grabar un disco.

Si habéis escuchado algo de Molotov alguna vez, sabréis de sobra que no son de morderse la lengua y que, si se la muerden, no tienen inconveniente en escupirte una buena flema densa y ensangrentada en toda la cara. Políticamente incorrectos sería quedarse muy corto. Ellos son la furia contra las máquinas. Ellos son ese pimiento picante que te deja la boca hecha un cuadro pero al que es imposible no darle un mordisco tras otro, sintiendo cómo te lloran los ojos con un escozor infernal pero adictivo. Ellos meten el dedo en la llaga, lo aprietan bien fuerte, y se ríen a dos palmos de tu nariz, salpicándote las mejillas con saliva.

Siempre he dicho que no hay que confundir "ser sincero" con "soltar todo lo que se te pase por la puta cabeza". Molotov están en un punto intermedio: muchas de las cosas que dicen son verdades como templos que merecerían ser denunciadas una y otra vez hasta la saciedad, pero la otra mitad no es más que provocación barata en un intento simpático y gamberro de llamar la atención. Y que conste que me vuelven loco.

Pero al gobierno mexicano de Ernesto Zedillo le molestó (y mucho) sus letras malhabladas y el hecho de que la portada de su carta de presentación fuera una prostituta vestida con el uniforme de una niña de 15 años bajándose las bragas, y poco más que casi los obligó a emigrar. Hombre, reconozcamos que no es que sea de un gusto exquisito, pero igual exageraron un poquito.

- ¿Pero dónde vas, micropene?
Por azares de la vida (o quizás por aquello de a lengua de Lope), los Molotov acabaron "refugiados" en España donde consiguieron en poco tiempo la misma notoriedad que habían alcanzado en su tierra natal. ¿Dónde jugarán las niñas? (dardito para sus compatriotas Maná) pervive en la memoria colectiva de los que habitamos entre Francia y Portugal y por aquel entonces no teníamos edad ni para hacernos una paja el desayuno como ese disco plagado de palabras malsonantes y bajos demoledores que había que escuchar a escondidas en el cuarto del hermano mayor (en mi caso, ajeno) para que no se te cayera el pelo.

Y ahora que tengo (o al menos eso se supone) más conocimiento me doy cuenta de las auténticas animaladas que son capaces de soltar por ese piquito de oro. De eso, y de que estamos ante un martillo neumático de funk a dos bandas, riffs quebrantahuesos, hardcore barriobajero y flow sabor tijuana.

La mala hostia se respira en el ambiente desde el minuto cero. Que no te haga bobo Jacobo es el primero de los numerosos puñetazos, en esta ocasión directo al estómago del reportero mexicano Jacobo Zabludovsky, acusado de manipulación informativa por orden del presidente Carlos Salinas para ocultar ciertas verdades al pueblo.

Molotov tienen dos características que, a pesar de no ser exclusivas, los convierten en únicos: la primera es el uso de dos bajos, lo que convierte cada base rítmica en una correosa y pesada melodía que sacará lo mejor de tu subwoofer; y el hecho de que las labores vocales se repartan casi a partes iguales entre todos los miembros del grupo. Debemos agradecerlo, pues hubiera sido una pena perdernos el estilo de Randy Ebright en Molotov Cocktail Party.


Después llega Voto latino, primer single y primer cambio de tercio con un cha cha cha en pos de la cultura global. El tema llegó a ser número uno en una radio de EE.UU. pero a mí me parece de lo menos reseñable del álbum. Si que es cierto que el tema del ritmo latino tiene su gracia, pero ya. Yo me quedo mejor con la impresionante Chinga tu madre, la historia de un pobre muchacho amargado porque la madre de su novia no los deja tranquilos durante un rato para que se la pueda follar llevar al cine. Estribillo épico.


Gimme the power es el himno por antonomasia (ojo, nótese el uso de la palabra "himno" que no "tema conocido") de Molotov. Cargado de bilis y con una armonía casi mágica entre el calypso y la guitarra acústica, nunca se ha escuchado demasiadas veces... ¡El pueblo, unido, jamás será vencido!


Pero sigamos, que aún nos quedan muchas sorpresas agradables, como es Mátate Teté. Si antes el aroma caribeño era inconfundible, aquí se puede apreciar cierta influencia grunge en el riff principal, distorsionado y atronador. Tremebundos también los scratches y, voy a decirlo claro, no sé quién es Teté, pero no me gustaría para nada estar en sus zapatos. Cuanto odio y qué divertido. Estribillo épico número dos.


En Más vale cholo, estos chicos, siempre tan serviciales, nos advierten de los peligros de mezclar borracheras con un bar lleno de aspirantes a narco. Demasiado densa para disfrutarse. Todo lo contrario que Use it or lose it, con esa atmósfera de space cowboy, a medio camino entre la psicodelia más verde y la música de la frontera al sur de Texas. Magnífico otra vez Randy Ebright.


Ahora llega Puto. Y yo debería decir algo... Bueno, me gusta mucho el último tramo del bajo. Y no creo que sea homófoba. Fuera de eso, la tengo tan escuchada y he tenido que aguantar a tanto imbécil que no tienen ni idea berreándola, que paso de añadir nada más. El fantasma (bueno, no está muerto, así que diremos que es una proyección astral) de Tom Morello posee la guitarra de ¿Por qué no te haces para allá? ...Al más allá para dedicarle una preciosas palabras de amor a una ex-novia. Todo muy romántico.

El final del álbum es realmente apoteósico: para empezar Cerdo nos invita a salir a la pista de baila a menear el esqueleto a ritmo del funk más discotequero y una letra tronchante sobre un gordo mantecas con un serio problema de control alimenticio. ¡Mueve tu puerco!


Y para terminar... Joder, para terminar el tema más animal y motivante de la historia de la humanidad. Porque, ¿quién no ha soñado con encontrarse con aquel pibonazo que se lo tenía demasiado creído y que ahora necesitaría un análisis forense para confirmar su pertenencia a la raza humana? Pues eso, zorras del mundo, esto es lo que todos pensamos: Quítate que ma'sturbas (Perra arrabalera). Estribillo épico número tres y esta vez os invito encarecidamente a corearlo a todo pulmón. Un puto mantra.


¿Y con este subidón cómo me voy yo a dormir? En fin, se hará lo que se pueda.
Cuídense compadres. ¡Y que viva México!

4 comentarios:

Aldo dijo...

Estuvieron en Buenos Aires hace poquito, yo no fui pero los vi varias otras veces y realmente son muy poderosos en vivo y tienen un timming del show envidiable.. la polenta de los dos bajos te golpea el pecho realmente.. aunque no sean muy de mi estilo los he disfrutado mucho.. buena elección!.. a ver con que voy.. Un abrazo!

Rafa dijo...

¡Tremendo disco! Lo voy recuperando de vez en cuando, y aunque es muy de los 90, sigue sonando fresco y descarado.

TSI-NA-PAH dijo...

Me gustan los frijoles hermano!!!Y este disco me recuerda una época fabulosa de mi vida.Trabajaba en una tienda de discos muy famosa de Barcelona y era vender discos de Molotov como churros!!!Esa portada que deja poco o mucho segun se mire a la imaginacion!Y porque no combinar rock , cachondeo y un poco de groseria en todo un disco!Muy buena eleccion amigo!Andale!
A+

PUPILO DILATADO dijo...

Escuché este disco mucho en paralelo con Narco, Brujería y O'Funk'Illo y era todo un subidón esa combinación asesina entre letras crudas y narcos y tremendos riffs que reventaban tus orejas.

La verdad es que aquello pasó y no he vuelto a escuchar más a Molotov...hasta ahora!!!

Acojonante 'post' y buena opción para el juego. Ha dado de sí por lo visto en los otros 'jugadores'.